En la cerrajería metálica en Tenerife se emplean diversos materiales. En esta entrada de nuestro blog vamos a hablarte de los más habituales, así como de las características y ventajas que aportan cada uno de ellos. Ten en cuenta que, dependiendo de lo que necesites, te vendrá bien decantarte por uno u otro metal.

El acero, sin duda, es uno de los más comunes en cerrajería metálica en Tenerife, tanto los aceros al carbono aleados como los inoxidables o los de baja aleación ultrarresistentes. Principalmente, se emplean en la fabricación de cerraduras, pero también en algunos vallados o puertas de comunidades y garajes. Las principales propiedades del acero son su buena resistencia a la tracción y a la fluencia, su conductividad térmica, su durabilidad y su conformabilidad. Los inoxidables presentan también una gran resistencia a la corrosión.

Otro de los metales que se usa mucho en este sector es el hierro. Es maleable y muy resistente y se emplea, sobre todo, en la fabricación de rejas y otras estructuras. El hierro es bastante duro y denso, por lo que con un buen mantenimiento te podrás beneficiar de su gran durabilidad.

El aluminio, aunque en menor medida, se usa también en cerrajería metálica. Más bien, es más común en la carpintería metálica. Se emplea para toda clase de cerramientos y, principalmente, en la fabricación de ventanas. Es un material sostenible, cien por cien reciclable y que no requiere de un excesivo mantenimiento.

Cobre, latón y bronce son otros materiales que pueden usarse en este sector, si bien en un porcentaje más reducido. El cobre es maleable, dúctil y buen conductor; el latón (aleación de cobre con zinc), además, es resistente a la corrosión; y el bronce (cobre aleado con estaño) tiene unas propiedades similares y se usa sobre todo para acabados.

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